Boom extremista se alimenta de la crisis y el odio

Mientras el gobierno Alemán ha lanzado una nueva campaña para mejorar su imagen mundial por causa del resurgimiento de ideas contra sus ciudadanos que los acusan de Neo Nazis, algunos están tomando partido extremista, y llegan a tomar como modelos asesinos fanáticos como el de Noruega.

Una marca de ropa alemana, caracterizada por su fuerte acogida entre los nichos y círculos neo-nazis, estrenó recientemente  su colección más novedosa y abrió un nuevo almacén, con el desafortunado nombre de “Breivik”, en “honor” al afamado asesino de más de 77 personas en noruega y autor de una serie de atentados terroristas, junto con un casi copiado manifiesto de supremacía racial y de aislamiento.

Los productores de dicho adefesio a la moda Thor Steinar niegan que sea con referencia a dicho hombre, sino a un lugar en noruego que curiosamente lleva el mismo nombre, y que su categoría neo-nazi, no implica que acepten toda acción que represente pensamientos similares.

Ante el escándalo, la sociedad civil se moviliza, pero el gobierno Alemán y muchos otros actores políticos se resisten a tomar en serio que nuevos brotes de este estilo, no son otra cosa que una nueva generación secularizada buscando refugio en extremos peligrosos.

Lamentablemente para muchos, este tipo de doctrinas extremistas y movimientos de corte nazista y nacional-socialista están en pleno auge en Europa, y están siendo enfrentados constantemente a grupos de resistencia sectaria por aquellos contra los que se presentan.

Francia se ve afectada hoy en día por la dicotomía entre unos ataques nacis, otros religiosos y ambos teniendo como fuente odios raciales, ideas políticas o religiosas de extremo, y en el caso de los soldados francesas (4 militares muertos), un aparente velo Neo Nazista. 

El asunto es delicado, pues ambos extremos se están armando hasta los dientes, con fondos que no sabemos de donde provienen, pero que están preparando el terreno para una guerra civil basada en argumentos de desprecio político, humano y religioso, como los que nuestra especie ya ha vivido en las mismas manos y con los mismos símbolos.

En Colombia la cosa no es diferente con movimientos extremistas de un lado y el otro que se ven afectados cuando sus bombas caseras explotan o que atacan inocentes por razones de orientación sexual u otros motivos banales.

Por su parte el Reino Unido se levanta encarcelando personas por un mensaje extremista en una red social, y los ejemplos siguen siendo denunciados sin lograr detener este efecto dominó entre extremistas y débiles mentales.

La solución, castigar a los padres, obligarles a dar formación a sus hijos en lugar de delegar en establecimientos educativos dicha labor. Si los padres se vieran realmente afectados por estas conductas, las reprimirían en el seno familiar y educarían a sus hijos de forma diferente. 

Adjunto, sería muy bueno ver el servicio social por cuenta de una acción extremista de padres e hijos limpiando los parques de la comunidad afectada, que devendría en pasar más tiempo juntos y realizar actividades provechosas al aire libre, en lugar de minar la sociedad con ideales caducos.

Por otro lado, los movimientos religiosos, terroristas y de suprema extrema, de izquierda y de derecha, se siguen expandiendo, siguen encontrando fuente y fundamento, en la crisis y en la falta de autoestima y conocimiento de gran parte de la población civil.

Este tipo de movimientos y de marcas conmemorativas de los más desagradables momentos de la humanidad, pasan por descarados cuando realizan sus eventos y sus lanzamientos de marca, en fechas alusivas al holocausto nazi, o con curiosa sincronía con ellos y con los nombres de los más sangrientos personajes de esos y de los nuevos movimientos, escondidos tras una incomprensible protección oficial.

En virtud de los hechos, es viable apreciar que existe cierto orgullo dentro de grandes sectores de la sociedad mundial de jóvenes extremistas, respecto de los homicidios, del caos y de los valores promulgados por los partidos nacional socialistas y extremos, haciendo la tarea del gobiernos, que como el  alemán buscan calmar los ánimos, aun más compleja, cuando el mundo puede ver que no existe un arrepentimiento unánime y una condena cuando movimientos y marcas realzan valores y elementos que las Naciones Unidas juraron públicamente no permitir que revivieran o se repitieran de nuevo.

Es importante tomarse en serio estos movimientos y reprimirlos desde su fuente, de otra forma, lentamente escalaran en el poder, como lo estamos viendo en diferentes potencias europeas  y latinoamericanas, y no tomarán mucho más antes de seguir reproduciendo escenas de terror y muerte como la de Noruega, Francia o América Latina, que solo sigue demostrando cómo estos pensamiento de extrema minan la mente de los débiles mentales y corroen se comprensión de la realidad abusando de su incapacidad mental y su confusión.

Sin lugar a dudas  existe una libertad de pensamiento, pero ella debe limitarse en protección del bien social, y ello implica no permitir divulgar o promocionar pensamientos extremos y mucho menos permitir el acceso de estos movimientos a partidos políticos o a medios de comunicación.

Creo que se quedan cortas las autoridades alemanas que procuran conjurar el hecho “solicitando enfáticamente” a la marca cambiar el nombre de su colección, en lugar de proceder a cancelar el registro y prohibir su venta, más cuando en el pasado dicha inacción facilito el acceso al poder de quien pasaría a ser el gestor de la segunda guerra mundial.

Hoy los invito a repeler lo malo, a tener una política de cero tolerancia sobre estos actos, que a veces pueden parecer intrascendentes, pero que paso a paso se apoderan del escenario social, y que siempre lo hacen haciendo uso de débiles mentales y desorientados, llevándolos a cometer actos infames, que siempre habrían podido ser evitados reprimiendo a sus actores intelectuales, limitando la propagación de dichas ideas y dando una mano a estos pobres insulsos que son utilizados por los extremistas como carne de cañón*Todas las imágenes contenidas, son producto de búsquedas en linea y no me perteneces, su único objeto es ilustrar el articulo y no tengo derecho sobre ellas (disponibles en búsqueda de imágenes google).